En este período de transición de la recesión al repunte económico, las empresas enfrentarán un escenario financiero más ajustado. Según la calificadora de riesgos Fitch, se espera que el apalancamiento promedio de las empresas peruanas, especialmente las grandes empresas bajo su observación, aumente a 3.9 veces al finalizar el año, en comparación con el 3.3 registrado en 2023. Esto marcaría el segundo año consecutivo de incremento en este índice de endeudamiento. Eva Rippeteau, directora de la calificadora, señala que las empresas peruanas están adaptándose a un entorno económico estancado, incertidumbre política, riesgos de refinanciación y desafíos climáticos. Aunque la estabilidad crediticia general se mantiene, las acciones recientes de calificación corporativa reflejan una liquidez ajustada, un apalancamiento en aumento y la posibilidad de incumplimiento en el servicio de la deuda.
Según Carlos Casas, docente de la Universidad del Pacífico, el aumento en este indicador puede interpretarse de dos maneras: como un endeudamiento para mantenerse a flote durante la recesión o para financiar expansiones ante la previsión de una recuperación económica. Fitch identifica varios riesgos clave para las empresas peruanas en 2024, incluyendo un crecimiento económico débil persistente, incertidumbre política, expectativas empresariales moderadas y un crecimiento vacilante en la minería, que es un indicador crucial de la inversión privada.
El apalancamiento de las empresas es relevante ya que, si implica un aumento de la deuda, indica que la empresa tardará más en cumplir con sus obligaciones financieras con los ingresos generados. En la coyuntura actual, salir de la recesión complica aún más este indicador. Sin embargo, tanto Casas como Edmundo Lizarzaburu, docente de ESAN, destacan que las empresas evaluadas por Fitch cuentan con un sólido respaldo de sus accionistas y equipos de gestión. A pesar de la inestabilidad política, Fitch advierte que las rebajas en las calificaciones de las empresas peruanas aumentan en momentos de debilidad económica y mayor inestabilidad política, lo que dificulta la planificación y expansión empresarial.
